Lucca
Según el New York Times, Lucca es uno de los seis destinos europeos que no hay que perderse.
¿El motivo? Una mezcla de arte, cultura, historia y belleza que es posible de descubrir en total calma y que ofrece una gran alternativa a Florencia.
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Además, Lucca tiene una tradición gastronómica que definitivamente vale la pena el viaje. No te pierdas, entre noviembre y diciembre, "Il Desco", un evento enogastronómico de los mejores productos locales e italianos.
Sería imposible hablar de las bellezas de Lucca en sólo unas pocas líneas y por esta razón enumeramos a continuación sólo algunas de sus peculiaridades. Te sugerimos descubrir las estrechas calles del centro histórico, los monumentos y las pintorescas vistas, tal vez acompañados por un guía local que puede revelar los secretos y anécdotas de esta ciudad multifacética.
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El tour comienza con Piazza dell'Anfiteatro, construida en la Edad Media sobre ruinas romanas. Esta zona cuenta con tabernas, trattorias y talleres de artesanos. Es una verdadera joya en forma elíptica, accesible a través de cuatro cautivadoras puertas abovedadas.
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Cómo no proceder luego sobre las murallas del siglo XVI-XVII que abrazan el centro histórico y son igualmente encantadoras. Los visitantes pueden descubrir a pie o en bicicleta el sendero de 4 kilómetros que ofrece vistas únicas de la ciudad, teniendo en cuenta que tienen 12 metros de altura.
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Luego no queda más que perderse entre las calles y las plazas, los jardines y los huertos, los palacios y las torres, desde donde podrás contemplar la maravillosa vista de las colinas.